De la mano de Dilluns Poetics, esta semana celebramos el 8M con un poema de Maya Angelou que, a pesar de las terribles dificultades y abusos que sufrió en su infancia, supo hacer del dolor poesía y rescatar sus raíces negras para que le dieran la fuerza y la valentía de levantarse después de cada caída.
Nos recuerda que podemos sufrir derrotas pero no podemos darnos por vencidas.
Su poema no es un desafío sino una exigencia.  La exigencia de ser escuchadas como mujeres,  de ser comprendidas y de ser reconocidas en igualdad con los hombres.  No más que ellos pero tampoco menos.
Su biografía es muy interesante y seguro que nos da fuerzas para seguir en la lucha.
¡Os la recomendamos.!