El absentismo escolar es un fenómeno complejo que no tiene una única razón de ser, sino varias. Esto supone que las administraciones deben atacarlo desde diferentes flancos, aunque sus intentos han sido en balde, ya que el número de casos que se dan en Madrid capital se ha mantenido casi igual a lo largo de los años. En el curso 2018/2019 se dieron 2.412 casos, una cifra mayor que el anterior (2.348) pero similar a la de 2015/2016 (2.442) o 2016/2017 (2.395). Lo que sí ha variado es el número de alumnos absentistas según el distrito, siendo especialmente grave en los barrios de menor renta.
Según los datos de la Dirección General de Educación y Juventud del Ayuntamiento de Madrid a los que ha tenido acceso 20minutos, ocho distritos del sur concentran la mayor parte de los casos. En números totales, Puente de Vallecas es el lugar con más alumnos absentistas (364), seguido por los 356 de Carabanchel y los 311 de Villa de Vallecas. Estos tres distritos, con 1.031 casos, concentran el 43% del absentismo, un dato que aumenta hasta el 75 si se tienen en cuenta las cifras de Villaverde (240), Usera (213), Latina (206), San Blas (88) y Vicálvaro (38).
Es más, estos tres últimos son los únicos del sur que han visto cómo descendía el número de casos, algo que en los demás no ha ocurrido. Esta tendencia se ha mantenido en otros como Moratalaz, Retiro, Chamartín, Fuencarral-El Pardo y Tetuán, mientras que en Arganzuela y en Chamberí la situación no ha cambiado. En términos porcentuales, Villa de Vallecas también destaca en el liderazgo. Un 2% de su alumnado es absentista, una cifra nada desdeñable ya que la media capitalina se sitúa en el 0,67%. En cuanto a Puente de Vallecas, Villaverde, Usera o Carabanchel, oscilan entre el 1,16 y el 1,28%, tan solo superados por Tetuán, una rara avis, ya que es el único distrito del norte que está por encima de la media, bastante lejos del 0,05% de Chamartín o el 0,10% de Salamanca.
«Aunque es un fenómeno complejo que depende de muchos contextos, no es casualidad que en el sur es donde haya más casos», asegura María del Carmen Morillas, vicepresidenta de la FAPA Francisco Giner de los Ríos. En una conversación con este diario cuenta que, aunque es difícil achacarlo a una sola causa, el absentismo tiene más opciones de producirse en familias con pocos recursos económicos o en «zonas gueto». Un hecho que, dice, puede ser «peligroso» ya que suele ir asociado «al consumo de drogas o a la marginalidad».
Una de las soluciones que propone es que las administraciones implicadas se centren más en la prevención, acompañando a los niños «en la transición del crecimiento evitando, por ejemplo, que no vayan solos al centro escolar de un día para otro, sino que se busque la manera dotarles de autonomía de forma acompasada».
En esa función podrían entrar los agentes tutores, policías municipales que están en los colegios o en los institutos. «Sus labores son de vigilancia en los entornos del colegio, pero no solo; cuentan con información suficiente como para hacer un seguimiento personalizado a los menores, impidiendo, entre otras cosas, el absentismo», expone Maite Pacheco, concejala del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid.
No obstante, el número de oficiales ha descendido. Mientras que en el curso 2017/2018 había 184 agentes tutores, el pasado año esa cifra se situó en 168. «Y va a seguir reduciéndose», expone la edil, que denuncia el recorte presupuestario del 12% en la partida que el Área de Familias, Igualdad y Bienestar Social, dirigida por Pepe Aniorte, destina a evitar el absentismo.
No obstante, fuentes municipales del departamento de Ciudadanos aseguran que «en ningún caso» se va a recortar la partida. Además, exponen que hay un contrato en vigor que casi alcanza el millón y medio de euros de dotación y que cuando finalice en el próximo mes de septiembre «se estudiará» si se aumenta su presupuesto.
Objetivo: una reducción del 20%
El PSOE llevará el crecimiento del absentismo a la Comisión de Familias, Igualdad y Bienestar Social de este martes, donde pedirá la puesta en marcha de un plan que consiga disminuir los casos de alumnos con faltas injustificadas en un 20%: propondrán «doblar» el actual presupuesto con el fin de aumentar la plantilla de agentes tutores para llegar hasta los 200 (32 más que ahora) y un protocolo de detección al que se puedan acoger todos los colegios de la capital.