Las peleas entre los padres dejan huella en los hijos

Según un estudio realizado por la Escuela Steinhardt de Cultura, Educación y Desarrollo Humano de la Universidad de Nueva York, y publicado en la revista científica Development and Psychopathology, la agresión entre los padres moldea negativamente la respuesta emocional de los hijos. La exposición a la agresión verbal y física entre los padres altera la facultad del niño de identificar y controlar sus emociones.

Los investigadores evaluaron a 1.025 niños y sus familias durante una serie de visitas al hogar desde que el niño tenía dos meses hasta los casi cinco años de edad. Se les hicieron varios cuestionarios a los padres y se les dieron determinadas tareas a padres y niños destinadas a medir el nivel de caos familiar.

Al cabo de 58 meses los investigadores midieron la habilidad de los niños para reconocer e identificar emociones correctamente y encontraron que una mayor exposición a las agresiones físicas entre los padres estuvo asociada con una mayor dificultad de los niños para identificar emociones.

Cuanto más prolongada era la exposición a l agresión, mayor era la dificultad de los niños para regular sus propias emociones de tristeza, abandono y miedo, lo cual los puso en mayor riesgo de presentar síntomas de ansiedad y depresión más tarde.

Ver discutir a los padres afecta la capacidad del niño para gestionar sus emociones y ya sabemos que el desarrollo de la inteligencia emocional, lograr identificar y expresar lo que sentimos es imprescindible para la vida.

Fuente de la noticia: www.bebesymas.com