El Ministerio de Educación atribuye a la Lomce la mejora de resultados en el rendimiento de los estudiantes españoles de nueve años en Matemáticas y Ciencias cuando la ley no estaba implantada en el momento que hicieron la prueba (abril y mayo de 2015) para ese nivel. La norma comenzó a aplicarse en 4º de Primaria un curso después (2015-2016), según figura en el calendario de Educación.

«Las claves de la mejora son la introducción de una nueva ley educativa que ha pretendido atender a la diversidad de los alumnos y que ha insistido en la autonomía de los centros. Medidas como la libertad que ofrece la ley para la adaptación de los currículos, el establecimiento de hitos de evaluación y reflexión y de itinerarios en los centros producen efectos en los alumnos», ha dicho el Director General de Educación, José Luis Blanco, en la presentación de los resultados del informe internacional TIMSS, elaborado cada cuatro años por la Asociación Internacional para la Evaluación del Rendimiento Educativo (IEA).

IEA es uno de los organismos de evaluación más antiguos y mide cada cuatro años cómo rinden los estudiantes de entre nueve y diez años (4º de Primaria) de 49 países. Sus resultados, como lo de PISA, son cuestionados por algunos pedagogos, y especialmente en estas edades tan tempranas.

En esta ocasión, los estudiantes han mejorado sus resultados, pero se mantienen lejos de la Unión Europea y la OCDE. España es el país que más sube en puntuación (23 puntos) en Matemáticas en comparación con los resultados de 2011 hasta alcanzar los 505, pero aún dista de 20 puntos de la media de la OCDE (525) y 14 de la UE (519).

Se coloca así a la altura de Canadá e Italia y supera a Francia, Croacia y Nueva Zelanda. Los mejores resultados corresponden a Singapur (618 puntos), Corea del Sur (608), Japón (593), Irlanda del Norte (570) y Rusia (564).

En Ciencias, los españoles también mejoran, en este caso 13 puntos, hasta 518, por encima de la media de todos los participantes (500). De esta manera se cercan a la UE (521) y la OCDE (528).

Entre las comunidades autónomas que han participado con muestra ampliada, Castilla y León encabeza los resultados, con 531 puntos en Matemáticas y 546 en Ciencias. Le siguen Madrid (525 y 539 puntos respectivamente), Asturias (518 y 538), La Rioja (518 y 532), Cataluña (499 y 511) y Andalucía (486 y 503).

El estudio también desglosa el porcentaje de alumnos y alumnas «excelentes» y «rezagados» en Matemáticas. Los primeros representan un 3% del total, una proporción menor a la media de la OCDE (10%) pero que se ha triplicado desde 2011. Los que reportan peor rendimiento, según las mediciones de TIMSS, se han reducido del 13% al 7%, lo que sitúa a España muy cerca del 6,8% de la OCDE.

Tercer país con más brecha de género

La brecha de género en el rendimiento académico según qué asignaturas se percibe desde Primaria, según el estudio. Los chicos españoles obtiene en este ‘mini PISA’ una media de 511 puntos en Matemáticas frente a los 499 que han reunido las chicas. En la OCDE la distancia son cinco puntos y en la UE, siete.

La horquilla en Ciencias es ligeramente menor, de solo seis puntos (521 y 515). La cifra en todo caso es superior a los dos puntos que distancian a chicos y chicas en el rendimiento en esta materia en la OCDE y la UE.

¿Hasta qué punto esta diferencia en números es significativa? Para el Ministerio de Educación lo es, y así subraya en el informe que ha elaborado sobre TIMSS: «El rendimiento de los alumnos españoles ha sido significativamente mayor que el de las alumnas, con diferencias más amplias que las medias internacionales».

Concretamente, España es el tercer país de la OCDE con más distancia en el rendimiento en Matemáticas entre niños y niñas. Esta diferencia, aseguran desde el Ministerio, es generalizada en todos los países –con más o menos brecha– excepto en Finlandia, donde las chicas rinden más que los chicos en estas materias.

En el sentido contrario, es común que ellas –como han evidenciado otros estudios– obtengan mejores resultados que sus compañeros en Lectura. Estas diferencias pueden explicarse, según expertas consultadas, a través de los roles de género: qué se espera de los chicos y de las chicas por el hecho de ser chicos o chicas. Dentro de estos estereotipos, se presupone que los varones están más dotados para carreras científicas y o carreras deportivas.

Fuente: www.eldiario.es