«Lejos de una finalidad catequética o de adoctrinamiento, la enseñanza de la religión católica ilustra a los estudiantes sobre la identidad del cristianismo y la vida cristiana». Esta filosofía es la que se recoge en el nuevo currículo de la asignatura de la Religión para primara y secundaria publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Sin embargo, el plan de estudios, que ha sido desarrollado por la Conferencia Episcopal Española en virtud de los acuerdos del Gobierno con el Vaticano de 1978, recupera la introducción de los rezos en el aula en el primer curso. En concreto, uno de los puntos evaluables es que el alumno «memoriza y reproduce fórmulas sencillas de petición y agradecimiento». Los niños más pequeños, de entre 7 y 8 años, también deberán conocer y apreciar a través de modelos bíblicos que el hombre es capaz de hablar con Dios. Los de segundo de primaria tendrán, por ejemplo, que leer y expresar, verbal o gráficamente, el relato de la Anunciación.
Entre los criterios de evaluación se encuentra «reconocer la incapacidad de la persona para alcanzar por sí mismo la felicidad». En otro momento el texto explica que «el ser humano pretende apropiarse del don de Dios prescindiendo de Él. En esto consiste el pecado. Este rechazo de Dios tiene como consecuencia en el ser humano la imposibilidad de ser feliz».
Junto a la introducción de los rezos en primaria, otra novedad es la desaparición en secundaria de las referencias explícitas a otras religiones, como el islam o el judaísmo, y la ausencia de debates sobre temas polémicos como el aborto, la eutanasia o el matrimonio gay. El currículo vigente, aprobado en el 2007, incluía, en primero de este ciclo, un punto sobre «la moralidad de los actos en el Cristianismo, y su relación con la propuesta moral del Budismo (sentido de la felicidad) y del Islam (valor moral de las obras)». El tercer curso estaba destinado de forma íntegra a comparar «el proyecto de Dios sobre el hombre según el Judaísmo, el Cristianismo y el Islam».
Para el nuevo curso, la asignatura de Religión será optativa en los seis cursos de primaria y los cuatro de secundaria. Los padres podrán elegir entre esta opción o Valores Éticos. Eso sí, su contenido será evaluable y formará parte de la nota media del curso.