Las aulas de toda España reciben en estos días a miles de alumnos después de las vacaciones de verano. Cada vez con menos profesores para darles la bienvenida, con pérdidas de más de 24.000 puestos de trabajo en dos años según las últimas estadísticas del Ministerio de Hacienda, y con una nueva ley educativa que marcará las clases. Para José Luis Pazos, presidente de la Federación de la Comunidad de Madrid de Asociaciones de Padres y Madres del Alumnado (FAPA) Francisco Giner de los Ríos, la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) es solo uno más de los problemas de las familias españolas.

La reforma educativa del Gobierno, diseñada por el ministro de Educación José Ignacio Wert y su equipo, «ha dado un respaldo legal al modelo educativo que defiende el Partido Popular y que en la Comunidad de Madrid ya se practica desde hace tiempo», denuncia. «Una escuela segregadora y separatista que no trata a todos los alumnos por igual», resume.

La LOMCE echa a andar este año escolar en los cursos impares de Primaria (1º, 3º y 5º) y para la Formación Profesional Básica, la creación del Gobierno para los alumnos con más dificultades para concluir la Educación Secundaria, que sustituirá a los Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPI). El representante de las asociaciones de padres y madres analiza la vuelta al cole en una entrevista con eldiario.es.

Este curso se implanta la LOMCE mientras hay CCAA que no han aprobado los currículos de las nuevas materias. ¿Puede implantarse la ley con las limitaciones de tiempo que denuncian los Gobiernos regionales?

La puesta en marcha de la LOMCE es una tozudez del Gobierno, cuando sabe que es una ley muerta antes de empezar. ¿Tiene sentido echar a andar una ley cuando toda la oposición ha dicho que va a derogarla en cuanto pueda? No, no tiene ningún sentido. Lo que quieren es que empiece en lo que se pueda y ya vendrán los demás a arreglar lo que hayan estropeado.

¿Qué va a estropear la LOMCE?

Va a echar por tierra los avances en materia educativa conseguidos en todos estos años. Propone un modelo de educación predemocrático, una escuela selectiva y segregadora, en la que se beneficia una especie de élite que tiende a perpetuarse en el tiempo. Por otro lado, quedan los niños a los que les cuesta más esfuerzo. Nosotros defendemos una escuela que impulse la igualdad de oportunidades, que cada alumno llegue a donde pueda.

Desde la Fapa Giner de los Ríos y la Marea Verde denuncian el «desmantelamiento de la escuela pública». ¿Por qué creen que el Gobierno querría destruir el modelo educativo por el que opta la mayoría del alumnado español?

En 1970, de cada 100 alumnos de Primaria solo 4 llegaban a la Universidad. Eran hijos de las familias más privilegiadas. Ahora, en España tenemos un porcentaje de alumnos en las universidades superior a la media europea. Lo que pasa es que el Gobierno defiende los intereses de una minoría de la población, a la que no le gusta competir con los hijos de las clases menos favorecidas.

Este verano la FAPA Giner de los Ríos ha llevado a la Comunidad de Madrid dos veces a los tribunales. ¿Se ha roto la posibilidad de diálogo entre la sociedad civil y el Gobierno?

El diálogo con la Comunidad de Madrid lleva roto desde hace tiempo. En los últimos ocho años nos hemos reunido solo una vez con la consejera de Educación, y porque lo forzamos nosotros. Con el actual Ministerio de Educación y el ministro Wert ocurre lo mismo. No escuchan a nadie, ni siquiera a colectivos menos beligerantes con lo que proponen. Solo se escuchan entre ellos.

Por eso hemos ido a Europa, al Parlamento Europeo y al Tribunal de Justicia de la Unión Europea, a decir que ya está bien. Que tenemos un Gobierno que no nos merecemos y que no está respetando los tratados internacionales ni la Constitución. Hemos denunciado la decisión de la Comunidad de Madrid de mantener cerrados los comedores escolares en vacaciones y por privilegiar la escuela concertada respecto a la pública en varios municipios.

Desde el inicio de la crisis, en 2008, el gasto de los hogares en enseñanza se ha disparado un 22%. ¿El Gobierno está desatendiendo a las familias?

El gasto se está desviando a las familias y eso supone un trasvase de renta de los menos favorecidos. Muchas de las ayudas para libros de texto, las becas de comedor, las ayudas a las rutas de transporte, han desaparecido. La educación obligatoria pública no es gratuita y eso contraviene la Constitución, que reconoce ese derecho. Las familias no deberían pagar ni un céntimo de euro en educación pública obligatoria. Debería estar financiada totalmente a través de fondos públicos, para que los padres que opten por una educación pública para sus hijos no tengan que abonar nada. Porque ya lo pagan mediante sus impuestos. Otra cosa es el caso de las familias que prefieran un colegio privado para sus hijos y que deben pagar por él.

La LOMCE da más peso a las asignaturas como Matemáticas y Lengua y recorta los tiempos de otras más artísticas, como Música. ¿Cree que se están adaptando los currículos de materias a las exigencias de exámenes como PISA?

El modelo educativo del Gobierno sigue el marcado por la OCDE [Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos], que ha diseñado un modelo de escuela que los beneficia. Este sistema convierte los centros educativos en meros instrumentos para sus intereses y lo que habría que hacer, en un primer momento, es cuestionarnos estas evaluaciones, como el informe PISA, que son incompletos y no analizan todas las facetas del aprendizaje. Tenemos que desprendernos de estas evaluaciones y ver qué modelo educativo queremos implantar; tal vez uno que dé más importancia a facetas culturales y artísticas.

¿Por dónde pasa la lucha contra la política educativa del Gobierno con la ley en marcha? ¿Llaman a la huelga como ha hecho CCOO?

Este verano ya hemos empezado varias actuaciones contra las políticas de la Comunidad de Madrid. Respetamos que cada organización valora sus opciones y los tiempos, pero nosotros entendemos que la huelga no es el mejor escenario. Preferimos sentarnos a hablar de manera conjunta, para organizar multitud de actividades. La huelga no es la úncia posibilidad. Por ejemplo, una denuncia en los tribunales puede surtir también efecto. Hay que analizar circunstancia a circunstancia.

Fuente de la noticia: www.diario.es