Desde la delegación de la FAPA en Vallecas, nos hacen llegar la siguiente reflexión:
COMUNICACIÓN A LAS AMPAS
Como quizás ya sepáis, el próximo 7 de mayo de 2014 la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid aplicará la prueba de Conocimientos y Destrezas Indispensables (CDI) para el alumnado de 6º de primaria.
Desde 2005 se ha venido realizando esta prueba sin que seamos muy conscientes de para qué ha servido. En un principio se habló de que con esa información se mejoraría la calidad de la educación pero, más bien al contrario, no ha habido más dotación de recursos materiales, ni de profesorado, ni de presupuesto.
Objetivamente, existen razones para dudar de la veracidad y utilidad de esta prueba.
– De tipo estadístico: No es fiable en su diseño técnico pues no permite conocer lo que realmente sabe el alumnado supuestamente evaluado mediante esta prueba, una sola, que mide contenidos exclusivamente y no tienen en cuenta las recomendaciones del informe PISA en relación a los procesos de evaluación.
La única consecuencia que hemos conocido de dicha prueba ha sido la publicación de un ránking de centros de acuerdo a sus calificaciones, donde se pretende valorar el nivel educativo, sin tener en cuenta el punto de
partida de cada centro, es decir, el contexto socioeconómico de la zona donde está ubicado, ni la composición del
alumnado, ni los recursos con los que cuenta cada centro. Es una prueba pervertida en su origen y en sus objetivos.
– De carácter pedagógico: Por un lado, no es una prueba diagnóstica que se oriente a conocer la situación de los
centros, y así dar soluciones a los problemas diagnosticados. Los resultados anteriores no han tenido un efecto de
mejora en la labor educativa de los centros (por ejemplo, con la mejora de los recursos, contar con más apoyos,
valorar la ratio alumno-profesor, etc. Al contrario, últimamente se han multiplicado los recortes). Por tanto, no sirve para mejorar las deficiencias encontradas. Además esta prueba no se correlaciona con la evaluación continua que realiza el profesorado a lo largo del curso.
Recientemente, si la nueva ley (LOMCE) sigue adelante, se impondrán en los próximos años los exámenes-reválidas (una en 6º) que ya eran el objetivo de fondo cuando se inventaron estas pruebas. Pese a esas deficiencias, la Comunidad ha malutilizado la prueba para difundir de forma ilegal, un ránking. En el “portal informático” de la Comunidad de Madrid se afirma que “La prueba tiene carácter formativo y orientador para los centros, para los padres y para los alumnos y sirve, además, para orientar a la Administración educativa respecto a la eficacia de sus planes y actuaciones”. Desde luego para los centros, las familias y los alumnos no tiene capacidad orientadora ya que la mejor información sobre sus capacidades y avances es aquella que el profesorado, y nosotros, sus familiares, vemos día a día, la que se proporciona en las reuniones y entrevistas que mantenemos y la que viene reflejada en un documento oficial: el boletín de evaluación. Confiar la determinación de la cualificación de un alumno de estas edades a una prueba concreta en sólo dos materias es, a nuestro entender, un desprecio a la labor de evaluación continua de sus maestros y una burla a la inteligencia de los padres.
Queremos una prueba cuyos resultados sirvan para mejorar desde la Administración la calidad de la Enseñanza Pública con políticas reales de inversión en recursos, formación y apoyo al profesorado y el alumnado.
Por todo lo anteriormente expuesto y teniendo como prioridad la defensa de la Educación Pública de nuestr@s hij@s os invitamos a reflexionar y debatir la conveniencia de que ést@s realicen esta prueba.