Que un colegio o instituto en España tenga una enfermera escolar es casi una quimera. Hay una por cada 8.500 alumnos y alumnas, según los últimos datos recopilados por el Observatorio de Enfermería Escolar del Consejo General de Enfermería. Regular su figura para atender urgencias, pero también para dar apoyo a pacientes crónicos y hacer la siempre olvidada promoción de la salud es una demanda histórica de sociedades científicas, sindicatos docentes y asociaciones que despunta como un resorte cuando se produce alguna desgracia, infrecuente pero posible, en un centro educativo.
Acaba de ocurrir uno de esos raros casos. A principios de esta semana falleció un niño de 12 años en un instituto público de Mijas (Málaga) que no tenía personal sanitario en la plantilla y fue atendido por los docentes, formados con un curso en el uso del desfibrilador que tienen en el centro. Un curso que tuvieron que pagarse ellos, por otra parte, según explicó una docente del centro en Twitter.
“Somos un centro educativo donde cada día se reúnen 1.300 personas entre profesores, alumnos y PAS (Personal de Administración y Servicios), además de familias y otras personas de paso. Muchos pueblos tienen menos población. Y tienen servicios médicos. Y enfermeras. También tienen enfermeras escolares los colegios privados y los concertados […], pero nosotros no podemos. Y pasa que como ayer, (que) la única ambulancia de la zona tarda 20 minutos en llegar. Y el niño muere. Y sí, a lo mejor no se podía hacer nada. Pero a lo mejor sí”, reflexionaba la profesora.
Natividad López, presidenta de la Asociación Nacional e Internacional de Enfermería Escolar (AMECE), ahonda en este punto. “El resultado probablemente habría sido el mismo y el riesgo cero no existe”, expone, “pero los padres y los profesores tendrían la tranquilidad de que se ha hecho todo lo posible. En un colegio a lo largo de un día pasan muchas cosas, pequeñas y grandes caídas. En la última que yo conozco en un colegio, la enfermera le mantuvo con vida”, cuenta. Es un caso más, no representativo quizás, pero igual del real que el otro.
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