Según estos colectivos, el documento expone con detalle las irregularidades e incumplimientos de las normas en el desarrollo de la actividad de la incineradora, el estado de sus instalaciones y el deficiente o nulo control de varias normas de seguridad “que tienen como resultado una grave amenaza para la salud de los trabajadores de la planta y la población cercana, así como la contaminación de animales, aire, tierra, subsuelo y aguas circundantes”.
“Las actividades contaminantes que se están produciendo en el Centro de las Lomas a consecuencia del mal funcionamiento de las instalaciones y de los métodos relatados en la denuncia afecta a bienes jurídicos colectivos como la salud de la población colindante y una amenaza de daños al medio ambiente”, precisan.
A su juicio, las anomalías en infracciones señaladas, pueden incurrir en un ilícito penal al incluir hechos como el mal estado y anomalías frecuentes de algunas instalaciones; el exceso de combustibles en las fosas de almacenamiento; las mediciones inexactas en hornos y emisiones; la saturación de almacenamiento de cenizas toxicas; y el funcionamiento incorrecto en calderas de combustión, sistemas de depuración de gases y control de emisiones con el resultado de emisión e inmisión de partículas procedentes de la incineración como dioxinas, furanos y metales pesados que tienen una probada relación científica con la prevalencia de graves enfermedades como distintos tipos de cánceres, reacciones autoinmunes, esterilidad, etc.
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