Familias y profesores reconocen que no hay tiempo material para impartir el currículum de primaria y secundaria después de que la Comunidad de Madrid haya adelantado este curso los exámenes de recuperación a junio. Hay casi un mes menos de clases
El nuevo calendario escolar que está aplicando este curso por primera vez la Comunidad de Madrid, y que adelanta de septiembre a junio los exámenes de recuperación, ha aumentado los deberes que los alumnos traen a casa después del horario escolar. Lo han notado las familias y los profesores en este primer trimestre de curso y así lo han reconocido a la Cadena SER. La primera evaluación se ha tenido que adelantar unas semanas, las notas de secundaria se han dado antes y, por tanto, denuncian, se ha ido «a toda mecha» en este inicio de curso. A pesar de que los alumnos cuentan con casi un mes menos de clases, por ese adelanto de los exámenes de recuperación, los contenidos no se han modificado ni adaptado para poder llegar a impartir todas las materias.
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«Solo triunfan los excelentes»
«Tiene contenidos que son inabordables en cualquier materia», reconoce Adela, profesora de primaria y madre de una alumna de secundaria. «Tienes que adaptar la madurez de los muchachos con los contenidos que tienen para que el fracaso no se dé ya desde abajo», asegura esta docente que no esconde que el currículo y la imposibilidad de impartirlo por igual a todos sus alumnos le obliga a ponerles deberes para casa. «Por supuesto, hay que acabar el trabajo que no se termina de hacer en clase o para afianzar los contenidos que se han visto en el aula y que el alumno no ha sido capaz de adquirir por su propio ritmo de aprendizaje», cuenta y relata que hay alumnos que llegan a empalmar hasta la hora de la cena.
Adela tiene claro que la LOMCE es la que ha provocado estos currículum «engordados», y que la Comunidad de Madrid ha empeorado la situación adelantando el calendario escolar para acabar con todo en junio. «Tendrían que racionalizarse los contenidos porque todo va en contra», explica esta docente mientras enumera los problemas que cada día se encuentra en clase: ratios muy elevadas, carencia de profesorado de apoyo o la imposibilidad de hacer desdobles. «Solo triunfan los que son más rápidos, los que tienen muy buena memoria, los excelentes«, afirma.
La FAPA Giner de los Ríos exige acabar con los deberes
Las familias, por su parte, denuncian que hay más deberes que el primer trimestre del año pasado y lo vinculan directamente con el nuevo calendario impuesto por la Comunidad de Madrid. «Los deberes se deberían prohibir», exige el presidente de la FAPA Giner de los Ríos, Camilo Jené. «Es un problema que genera la Administración y por tanto no se puede repercutir en las familias», asegura Jené que reivindica que se respete el espacio fuera del horario escolar como un espacio donde solo deciden las familias.
La Giner de los Ríos pide al Consejero de Educación que no se lave las manos con los deberes, después de que Van Grieken se haya limitado a enviar unas recomendaciones a los centros. La Comunidad de Madrid no legislará sobre las tareas escolares y ha optado porque cada centro educativo consensúe su propia política con este asunto. La Consejería enviará una circular a todos los centros para que abran un proceso de diálogo con las familias y los docentes. Un portavoz de Educación reconoce a la SER que «es cierto que este año puede ser un poco más complicado por el cambio de calendario», aunque en próximos cursos esperan ganar un poco con el adelanto del calendario en septiembre.
El nuevo calendario escolar de Madrid está ahora mismo en la mesa del Tribunal Superior de Justicia de la región tras el recurso presentado por la Federación de Enseñanza de CCOO de Madrid. El sindicato recurrió el adelanto de la fecha de celebración de los exámanes de recuperación de septiembre y exige que el mismo calendario se aplique en los centros concertados y privados de la región.
Fuente: cadenaser.com