En conferencia de prensa, los padres y madres han asegurado que la edad del alumnado de tercero no es la adecuada para realizar una prueba «que pueda condicionar su proceso educativo» y «ni siquiera puede ser una herramienta fiable con la que evaluar la calidad educativa de un centro y mucho menos del sistema educativo».

Los resultados de esta evaluación, han denunciado, se utilizarán para la realización de un ránking público de colegios «con consecuencias segregadoras en los procesos de admisión, además de generar competitividad entre centros».

Además, han criticado que se trata de pruebas «estandarizadas y totalmente descontextualizadas», ya que son las mismas para todos los estudiantes «sin tener en cuenta factores como el contexto económico, social y cultural del alumnado, atentando así contra el principio social de igualdad de oportunidades».

También han censurado que se valore sólo los resultados de una prueba, «quitándole importancia al proceso de aprendizaje y a la evaluación continua».

Por ello, han rechazado estas pruebas y el resto de las que se establecen a lo largo del sistema educativo y han mostrado su malestar a través de más de 800 firmas de padres y madres de alumnos de tercero de Primaria.

Estas firmas las entregarán a finales de abril en el Departamento de Educación, al que piden, al igual que a los consejos escolares, que explique las medidas que van a tomar en el caso de que dichas pruebas fueran realizadas.

Fuente: www.noticiasdenavarra.com