Los profesores se muestran abiertos a hablarlo. «Hay una cierta preocupación por el hecho de que en los indicadores internacionales salga que en España se hacen más horas de deberes que la media y que no haya correlación entre el trabajo en casa y los resultados académicos. Es necesario abrir un debate», expresa Francisco García, secretario general de la Federación de Enseñanza de CCOO.
Constata lo que varios profesores han denunciado ya: «Es posible que la Lomce, en la medida en que es una ley con currículos más cargados y pesados, esté generando una mayor carga de trabajo para casa». Aunque la ley no regula los horarios, hay centros de distintas autonomías que han reducido la duración de las clases de 60 a 45 minutos. Los críos tienen que hacer lo mismo en menos tiempo, algo que puede haber incrementado la carga de las tareas.
¿Pero hacen bien los padres en quejarse? «Lo de la insumisión no es el camino. No se debe desautorizar a los profesores delante de los hijos», responde Ricardo Moreno Castillo, catedrático de Matemáticas y autor de La conjura de los ignorantes. En su opinión, negarse a hacer los deberes «no debe ser una opción». Pero añade, eso sí, que «los deberes deben ser menos y más útiles». «Algo está funcionando mal. Los deberes hacen falta, pero ahora son excesivos. Eso de construir con tus manos un volcán y de hacer trabajos durante toda la tarde no sirve de nada».
Fuente: www.elmundo.es