Los socialistas incluyen entre sus propuestas electorales para las elecciones generales del 20 de diciembre, entre otras medidas educativas, «promover un acuerdo con las comunidades autónomas para ordenar y limitar los deberes escolares a realizar fuera del horario escolar». La iniciativa se suma a su intención (reiterada en otros programas electorales y nunca ejecutada) de sacar la Religión de las aulas y a la promesa de favorecer la escolarización hasta los 18 años.
El debate sobre los deberes vuelve periódicamente a la actualidad. El pasado septiembre, la Confederación de Asociaciones de Padres (Ceapa),que representa a 12.000 asociaciones de familias de los centros públicos,reclamó que se eliminaran estas tareas. Pidieron una reflexión «profunda» sobre el asunto y aseguraron que las jornadas de los escolares pueden llegar «a 60 horas semanales» entre el aula y las tareas para casa. Los representantes de las familias con hijos en la escuela concertada católica (Concapa, con 2.500 asociaciones) también cree que hace falta un debate, aunque sin rechazar los deberes.
Tras la solicitud de las familias, se manifestó el ministro de Educación,Íñigo Méndez de Vigo. «Me parece que es un motivo interesante de reflexión. Yo creo mucho en la autonomía de los centros a la hora de impartir la enseñanza y si luego ésta tiene que ser completada o no con deberes», indicó el titular de Educación en unas declaraciones recogidas por la agencia Europa Press.
Los deberes, en efecto, son fijados por cada centro de forma autónoma y por cada profesor, en su caso. España está entre los países en los que los alumnos de 15 años destinan más horas (6,5 semanales frente a la media de 4,8 en los países industrializados), según los últimos datos de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), correspondientes a 2012.
La OCDE destaca, como hicieron las familias de la pública en su última comparecencia sobre este asunto, que los deberes pueden abrir una brecha entre alumnos con más o menos recursos. Pero el organismo internacional defiende, por otra parte, que las tareas extraescolares pueden «ayudar a los estudiantes con dificultades» o ser un estímulo adicional para alumnos con altas capacidades.
Fuente: http://politica.elpais.com/politica/2015/10/23/actualidad/1445592314_287816.html